miércoles, 23 de diciembre de 2009

NAVIDAD, DULCE NAVIDAD...


Las cosas que me fastidian de Navidad:
-Que sea "cuasi-obligatorio" comer lechón, ensalada rusa, tomates y huevos rellenos y vitel toné.
-El loquero de los shoppings llenos de freaks al borde de la histeria y la desesperación que dejan las góndolas de todos lados hechas un quilombo.
-Las eternas filas de cada año para que los chicos se saquen una vez más la foto con Papá Noel.
-Los arbolitos de pocas ramas simil anoréxicos y para rematar que estén adornados con luces de muchos colores y guirnaldas navideñas peludas y metalizadas.
-Las publicidades de Coca-Cola y sus promos de platos, vasos y cubiertos con motivos navideños.
-El turrón de pasta de almendras.
-La sidra, la fresita y el ananá fizz.
-Que pongan en cadena nacional "Jesús de Nazareth". La venimos viendo desde que nacimos, dennos un respiro!
-El 24 sin mis hijos... sin chicos en la casa no hay magia y nochebuena no es lo mismo.
-Que en todos lados te den calendarios horribles, destinados a terminar potencialmente en la basura.
-Que en todas las familias haya quilombo por quien la pasa con quien y en dónde.
-Las tarjetas non-sinceras.
-Las frases hechas.
-Las casas saturadas de lucecitas, renos y otras yerbas.
-El continuado del 25: irremontable, innecesario, comer sobras, levantarme temprano cuando terminaste roto el día anterior...
-Que cuando vas a cambiar los regalos los "atentos vendedores" se hayan transformado en "máquinas de impedir".
-Los puestos de pirotecnia truchos.
-Que la gente que nunca va a misa, vaya a misa.
-Que me manden sms´s generales. No es necesario quedar bien el 24 simplemente porque es Navidad...
-Los mails con tipos en bolas con gorros y tapa-rabos navideños (los strippers apestan, me dan "puto").
-Los villancicos, puaj....
-Que a esta altura lo único que Papá Noel sepa decir sea: Ho, ho, ho... (ya fue, alfabetizenlo!).
-Los presentaciones con powerpoints navideños.
-Las líneas telefónicas saturadas.

Las cosas que me encantan:
-Comprar regalos para los otros.
-Armar el arbolito con mis hijos y decorar la casa para las fiestas.
-Esconder los regalos y distraer a los chicos para que luego los encuentren y extenderles la ilusión y el juego de que Papá Noel Si existe.
-Poder elegir con quien pasar las fiestas.
-Sentarme en el parque de casa a mirar el cielo después de medianoche y disfrutar del espéctaculo de los fuegos artificiales de casas vecinas fumando un habano con mi hermano (tremenda y emotiva tradición familiar "varonera").
-El pan dulce sin frutas.
-La ensalada de frutas cortada bien chiquita que hace mi mamá.
-Que mis hijos más grandes sepan que Papá Noel no existe pero tengan la grandeza de guardar el secreto en pos de la ilusión de su hermana menor.
-Que te la pasas de cena en cena 15 días antes para despedir el año.
-El momento de balance.
-Pensar por qué brindar.
-El turrón blanco de maní.
-La tradición de usar ropa interior rosa, nueva y regalada.
-Las vacaciones de navidad de mi trabajo. Querido escritorio: este año te veo el 4 de enero!!!

viernes, 18 de diciembre de 2009

EN ESTAS FIESTAS, BRINDO...


...por una vida con más "gracias" y "perdón" y con menos malos entendidos e intenciones dudosas.

Porque se reduzcan mis prejuicios, pero crezca mi lado bueno.

Por más tiempo libre, menos viandas, menos stress...

Porque predominen las relaciones cara-a-cara y se diluyan las cara-pantalla.

Por más tiempo para los afectos y menos tiempo para la estupidez nuestra de cada día.

Porque nuestro país se des-Tinellice y en su lugar la gente crea en las opciones.

Porque nos sinceremos y valoremos siempre.

Por la oportunidad de crecer a diario.

Por más tiempo con los más chicos, y por más tiempo para ser chicos.

Por la libertad de expresarnos.

Por mis amigos de siempre, por los de a veces, por los que llegan y por los que se van.

Por la posibilidad de cambiar aunque cueste horrores.

Por la alegría que me produce bailar.

Por la nostalgia que me da tener tantos amigos lejos.

Por la magia del reencuentro.

Por más paciencia y menos ansiedad.

Por las canciones que nos traen recuerdos, y por los recuerdos que nos traen música.

Por la inocencia de Ailine, por la dulzura de Rama, por la sensibilidad de Lucas.

Por acompañarlos y poder estar siempre.

Por entender o por tratar al menos...

Por la felicidad que nos producen nuestros logros y por los logros que alcanzamos con felicidad.

Por un brindis completo, por todo lo que nos completa y también por mucho más....

martes, 24 de noviembre de 2009

LOS VIEJOS


Irritada y porque no preocupada por algunos comportamientos que nos rodean a diario, me tomé la molestia de buscar en el diccionario el significado de "envejecer" y me atrevo a decir que la definición del mataburros no es la correcta, o cuanto menos es obsoleta.... los viejos no son "eso", son personitas muy distintas...

A saber, a continuación mis teorías...

Aspecto I: Para empezar se vuelven exponencialmente rompe-bolas (es importante el guión para hacer énfasis en que rompen las bolas lenta y pausadamente), fastidiosos, y absorventes que creen que cada vez que uno no les está encima es porque nadie los quiere, y a nadie le importa lo que pasa en torno a sus vidas. ERROR!!! Sí nos importan, pero ocurre sencillamente que además tenemos familia propia, amigos, mascotas, cosas, pero además tenemos trabajos en donde casualmente nuestros jefes pretenden que trabajemos 8 horas y donde no está bien visto que los empleados saturemos las líneas telefónicas escuchando que compraron nuestros padres en la verdulería, que remedio nuevo están tomando, o que historia le acontece a la hija de fulanito.

Aspecto II: ¿Qué pasa con el baño? ¿Por qué la mayoría empieza con esta práctica sistemática de empezar a saltear días de baño? El cuerpo transpira y necesita ser higienizado en forma diaria tenga uno 20, 30 o 70 años. Eviten por favor intentar hacerse los anarquistas con su higiene personal a esta altura del partido y recuerden cuanto inculcaron a sus hijos el tema del baño cuando éstos eran adolescentes. Todo sigue igual. El agua es agua, el jabón es jabón, y lo que no se limpia desafortunadamente huele.

Aspecto III: El abandono gradual. El no trabajar más o el estar todo el día en la casa NO implica abandono. Entonces... qué es esto de no cambiarse, de andar en pijama todo el día, de adoptar las pantuflas como prenda de cabecera? Si como generación decidieron que no se usa más afeitarse, o andar con el pelo prolijo, mínimamente comuníquenlo, adviértanlo... de lo contrario serán la nueva generación de "espantores".

Aspecto IV: ¿Dónde fue a parar el contenido del ropero? ¿Por qué creen que por ser la tercera generación pueden hacer esas mezclas inexplicables? Jogging abajo con sweater de vestir arriba, no va. Buzo de algodón 3 días seguidos tampoco. Pantalón deportivo Sergio Tacchini de tela de avión con campera de carpincho, menos (ni aunque combinen los colores). Falsa campera adidas de 4 rayas bordó con pantalón pinzado, menos que menos. Y estos son sólo ejemplos.... ¿Por qué??????

Aspecto V: Pueden NO opinar sobre todo. Ya sabemos que podríamos cortarles el pelo más corto a nuestros hijos, que las plantas se podan en invierno, que el flequillo de la nena no la deja ver, que "la chica" no limpió debajo del sillón, que las salchichas están hechas con residuos tóxicos más o menos, que podríamos llamar a algunos parientes más seguido para que "no se corte", que manejamos rápido, que la música está muy fuerte, que tenemos que comer porque "estás flaquita nena", que no hay que mirar la tele tan de cerca, y que sandia con vino te morís... pero sencillamente queremos hacer las cosas así porque así nos gustan y así estamos cómodos, así que no nos saquen de este maravilloso estado de independencia que hemos logrado después de largos años de lucha...

martes, 20 de octubre de 2009

CENTROS DE DEPILACION


Reducto indeseado sino odiado por gran porcentaje del plantel femenino. Ardua tarea. Dolorosa sensación. Desagradable experiencia...

A la hora de embellecernos casi todas las actividades son más o menos agradables y/o reconfortantes, excepto una: depilarnos!


La depilación es sólo una tarea que nos brinda grandes placeres luego de realizada -porque no podemos negar el fetiche que representa acariciarnos las piernas luego de-, pero en el proceso nos topamos con un sinfín de situaciones que impiden que la apreciemos con buenos ojos.

Nro.1: Es doloroso. Y por más que el fin justifique los medios, en ese medio, sufrimos con cada tirón, cuando no se nos llenan los ojos de lágrimas porque a la señorita que nos tocó en suerte se le fue la mano con la temperatura de la cera y nos quemó en las primeras pasadas.

Nro.2: Los centros de depilación son patéticos. Todos o al menos 99% de los mismos están ambientados con esmerado mal gusto en donde pareciera que lo único que quieren es que deseemos salir de allí lo más rápido posible.
Habitualmente las paredes están pintadas de deprimentes tonos como ser rosa viejo, prefrentemente con pinturas brillantes para potenciar el mencionado mal gusto, y en composé con las paredes cuelgan por todas partes primitivos carteles realizados en computadora por algún familiar/amigo inexperto en la materia en donde a través de básicos "fonts" standard nos dan a conocer el valor de cada zona a ser descabellada: axilas, media pierna, pierna entera, bozo, cejas, tira de cola, cavado, cavado profundo, brazos para las descendientes directas de simios, o pelvis completa para las de la nueva era....

Nro.3: Intimidad cero. La depilación no es para pudorosas. Los gabinetes están hechos de delgadas paredes de distintos materiales (pero nunca una construcción húmeda) y en la mejor situación son de durlok. Por algún motivo estas paredes nunca van de piso a techo, sino que finalizan por lo menos 30 cm antes de llegar al cielo raso, y como agregado las "no-puertas" son simples y horribles cortinas simil hospital lo cual en conjunto nos asegura que todo lo que se hable allí dentro mientras estemos en la camilla será definitivamente de público conocimiento.
Todas las que se estén depilando en ese mismo momento en gabinetes linderos sabrán no sólo el tipo de depilación del que somos habitué sino que además se irán con las respuestas de los reportajes a las que las señoritas depiladoras acostumbran a someternos para matar su aburrido oficio.

Nro.4: La inexplicable elección de convertirse en depiladora.
Piernas, axilas, bozo.... más o menos vamos.... Pero, cómo se llega a querer ser depiladora sabiendo que vas a tener que hacerle el cavado, la pelvis y la tira de cola a una extraña que en la más favorable de las situaciones es "limpita", pero de lo contrario toca quien toca....??? Puajj, no lo entiendo.
Y como no lo entiendo hace más de 15 años, cada vez que voy a depilarme le hago la misma pregunta obligada a modo de ritual a a la que me toque en suerte, y la respuesta es siempre un resignado "ya estoy acostumbrada"...

Nro.5: El repaso final.
Acá todo depende de la profesional. Si se tocó la "apurada", ella te depila y luego, algodón y alcohol en mano, te pega una rápida repasada por todos lados para despegar cualquier resto de cera que pudiera haber quedado impreso en tu cuerpo.
Si te tocó la "obsesiva detallista", ella mete mano en su delantal y saca su arma más preciada: la pinza de depilar. Pinza que está por cierto siempre llena de cera en la punta, que evade su función de detectar y sacar el bello que pudiera haber quedado, y que por tanto te pellizca en cada intento por eliminar aquellos rebeldes que no se rindieron a pesar de las dos pasadas de cera a altas temperaturas.

Nro.6: La profesional.
Preferentemente de nombre: Mirta, Mabel, Gladys, Emilse, Esther (con h), Astrid o Graciela....

Nro.7: La sala de espera.
Obligadamente abarrotada de revistas "del corazón" y/o chimentos, pero ni siquiera nuevas. Todas sin tapa y sin la mitad de las notas.

Para Vicky, esta es la única parte gloriosa del tortuoso ritual del que se despide y al que finalmente va a extrañar porque se decidió por la depilación definitiva.....


domingo, 18 de octubre de 2009

LOS HIJOS (en el día de la madre...)



Ser padres es tremendo. Es intenso. Es célebre. Es dificil. Es maravilloso. Es inexplicable.
Los hijos tienen la capacidad ciclotímica de llevarnos de un sentimiento extremo a otro en cuestión de segundos: del amor al odio y de vuelta al amor, de la felicidad a la tristeza, del blanco al negro y del "te adoro" al "te mato"... y todo sin escalas.

¿Quien no les ha gritado alguna vez hasta llorar de vergüenza (¿o a quién no le ha pasado como hijo?), y luego ha tratado de remediarlo durmiendo abrazada a ellos toda la noche en un rincón de la cama?.

¿A quién no le ha pasado de estar mirándolos y sentirse la mamá más orgullosa y acto seguido abrir el cuaderno de comunicados y querer ahorcarlos porque nos enteramos de que tenemos una cita en el cole para renegociar su estadía en el mismo?

¿A quién no se le salió un patito de la fila al escucharlos pelear antes de haberse levantado?
Pero en la vereda de enfrente están todas las satisfacciones que nos dan a diario y es ahi donde justamente nos olvidamos de todo lo anterior y nos convertimos en los seres más ambivalentes.

Ellos tienen capacidades únicas para con los padres.
Los hijos nos hacen crecer como personas, y nos dan incluso ganas de ser mejores personas.
Un hijo nos devuelve una imágen tan fuerte de uno mismo que uno no puede NO verla o ignorarla.

Pasa en las mejores familias... lo sabemos aunque no lo digamos.

viernes, 16 de octubre de 2009

VELORIOS


Si hay algo deprimente para casi la mayoría de la gente, es ir a un velorio, por todo lo que esto implica en todos los sentidos.
El velorio es un momento "indeseado", te caiga en el momento que te caiga, sea quien sea el muerto:
- Si era cercano y querido, es un embole la situación porque lógicamente vas a estar triste, con más o menos consuelo, pero angustiado al fin.
- Si no era cercano ni querido, pero media el "estúpido" compromiso, es dos emboles: porque te comés el garrón y además sos un hipócrita.
- Si era cercano y no-querido (lease familiar con el que estabas peleado o familiar que no frecuentabas), te va a tocar en suerte verte con un millón de otros familiares de esos que no ves nunca por que son unos pelotudos, y que por tanto y en cuanto, se van a hacer una panzada por el tiempo que dure el velorio dándole a dos manos a todos los presentes, haciendo uso de una alta concentración de patéticas y trilladas frases hechas para matar el tiempo, porque nadie se habla con nadie, no hay tema.
DOS ESTUPIDOS DILEMAS ACERCA DE LOS VELORIOS:
1) A los velorios "hay que ir" bien vestidos. ¿Mito o boludez? Obviamente nadie va a ir en bolas a un velorio, mucho menos en triquini, pero qué significa ir bien vestido y para quién en todo caso?. Para el muerto seguro que no, en su estado ya no nos va a desaprobar.
2) En los velorios todos hablan bajito. Igual que en el punto anterior: obvio que nadie va a andar a los gritos, pero qué es lo que impide que se hable en tono normal, en volúmen crucero? Descartado que no es el lugar para ir a hacer un karaoke, pero otra vez, el muerto muerto está, y no hay forma que se vaya a molestar por esto, ni corre peligro de despertarse. Hablar bajito está linkeado con estar triste.... viene por ahí creo, entonces si hablás bajito va de la mano de que estás más triste o aparentás estarlo al menos....mmmmm
LAS FRASES: Hay dos grandes grupos de frases:
A)
Las frases acerca del muerto que estaba bien hasta que se murió (el muerto inesperado):
-Era tan jóven!
-Tan bien que se lo veía
-Pensar que andaba de acá para allá
-Dicen que hace unos días se lo veía distinto, con otro semblante
-Murió contento, eso es lo bueno
-Dejó una familia hermosa
-Hasta el último día andaba como un relojito
-Ojalá todos pudiéramos irnos así, sin notarlo siquiera
-No sufrió nada
B) Las frases acerca del muerto que venía mal hace rato (el muerto hecho mierda):
-Fue lo mejor, para qué seguir sufriendo?
-Pasó a mejor vida
-Vivir así no era vida
-Hasta la familia necesitaba un descanso
-Dejó una familia destrozada
Y LOS COMENTARIOS DE LOS QUE VAN AL VELORIO A HABLAR MIERDAS:
-Ahora agarrate, salen de acá y empieza la guerra por las cosas materiales
-Vos viste con la ropa que se apareció la desubicada?
-El que no estaba era el hijo, parece que no se hablaban hace rato....
-Pocos amigos no?
-Qué desastre el servicio, con lo que te sacuden!!!!
-Qué ganas de hacer el entierro tan lejos, por Dios!
-A mi que me cremen, ya se los dije a los míos...
-Pintón el viudo! Va a rehacer pareja enseguida, olvidate!
-Que avejentado se lo veía dentro del cajón, no?
-Por qué los maquillarán tanto?
-Las coronas, cuánta plata tirada!

...Y así termina el velorio y súbitamente descubrís lo que significa la famosa "cara de velorio"... y te querés morir!!!

lunes, 5 de octubre de 2009

LLEVAR PUESTA LA PROFESION


Algunos personajes hacen una especie de culto a su profesión u oficio y viven permanentemente disfrazados de su trabajo.


Un caso típico: la profesora de inglés.

Ella va por la vida orgullosa de lo que estudió y nos lo deja saber a todos en todo momento. Quiere que todos sepamos que ella es "bilingüe". Ella llega a su clase y antes de entrar a la misma ya viene hablando en inglés, sola obviamente, desde que salió de su casa. Se cruza con el portero, de nombre Juan Gómez, y lo saluda con un enfático "morning John!" cuando el pobre muñeco apenas habla algo más que su "chaqueño natal". Ve un bebé y esboza un pegajoso "how cute!". En el taxi saluda al tachero con un peligroso "hi darling" sin medir cuanto se excita ese morocho sudado con su tonito de falsa extranjera. Y así sigue torturando gente hasta que llega a la oficina donde se dispone a dar sus clases bi-semanales y al entrar lanza un "hello my dear" a la recepcionista, la cual no puede más con ese teléfono descompuesto de cada lunes y viernes, donde "misis" Perez habla en inglés y ella responde intencionalmente en castellano como si fuera una pulseada.

Otro ejemplo es el profesor de tennis. Que te lo cruces en el club y vaya orgulloso de sus cortos, su chomba dry fit, obligada gorrita, zapatillas de marca, muñequera de toalla y tono caribeño entre la zona de la muñeca y los biceps, todo OK. Pero lo triste es que después te lo cruzás en la reunión de padres, porque casualmente sus hijos van al mismo cole que los tuyos, y el tipo sigue con la muñequera. Y vas al super y él está con amigos comprando cosas para un asado, vestido ya no de profesor (o sea, no está dando clases, correcto?) pero la encarnizada muñequera sigue ahí clavada... (díganme que es un tatuaje!!!).
Otra, la profesora de aerobics. Vaya donde vaya, ella y todo su equipo deportivo son una sola cosa, un combo inseparable. Un combo que se compone de calzas (brillantes pegan más!), zapatillas con cámara de aire (puaj!), top y panza al aire, medias abultadas al tobillo, y opcional vincha para las más pardas y en su defecto si está fresco el agregado de un "buzito" (eso sí, todo combinado, desde ya.... no restemos importancia al outfit!). Ellos -profe y equipete- van así juntos a todas partes: a la clase de aerobics, al almacén, a la iglesia, a la peluquería, al shopping, a la casa de amigas, el fin de semana, de vacaciones.
Y hay más, muchos ejemplos más.....

sábado, 26 de septiembre de 2009

CINE DE "MIERCOLES"


Para todo amante del cine no hay nada peor que todo aquello y todos aquellos que intentan por todos los medios restarle estilo al programa de ir al cine con lo que encuentren a su alcance, no importa qué.

De arranque y antes de entrar, tenemos a los que se fastidian rápido ante la falta de estacionamiento y en su desesperación por no esperar matarían al que se les cruce por un lugar, y mucho más si se trata de un invaluable lugar cerca de la entrada. Estos se cegan ante la detección de un espacio y aún si uno estuviera antes que ellos aguardando paciente con las valizas prendidas, ellos omiten todos estos mínimos detalles y meten la trompa de su nave con sus mejores caras de boludos.

Luego tenemos a los que van al cine a comer DE TODO y que parece que desembarcaron en el cine luego de haber ayunado por semanas. "De todo" es preferentemente todo aquello que hace mucho ruido y rompe las bolas, caso caramelos con envoltorios ruidosos, o "pochoclos" (quién mierda nacionalizó esta moda traída de los países del norte?). Porque todo bien con los pochoclos o "pop-corns" en todo caso, pero hace falta comer desesperadamente como roedores?. Excluyo a los niños de esto, pero en una película de adultos, es necesario?. Si en sus casas en sus putas vidas hacen pochoclos, porque se hacen los fans del pochoclo en el cine?.
Y ni que hablar cuando un grupete de varios compra el combo de los maxi-super-extra-pop corns de 2 kilos + la coca gigante, todo para compartir, y entonces a lo largo de la película no sólo tenés que escuchar como los mastican, sino que también cada clavados 2 segundos uno le dice a otro: "me pasás la bolsa, me pasás la coca, me pasás la bolsa, me pasás la coca....


Otro grupo, son los integrantes del "fan club de romper las bolas con los celulares". Ya todos sabemos que no se puede entrar al cine a ver una película con el celular prendido. Así y todo, antes de cada película, ante la presencia de un caído del catre, te pasan el anuncio avisándotelo... con lo cual sino sabías, si sos de marte, si te olvidaste, si lo ignorabas, si sos adicto al celular, o si sos un forro... ya no tenés excusa. Pero no. Nunca falta el enfermo que lo deja prendido a pesar de todo lo anterior, sin siquiera pasarlo a vibrador o a silencioso. Y lo peor es que cada vez que le suena, el hijo de puta lo atiende -porque por eso y para eso es hijo de puta- y le explica mansamente al que lo llamó que está en el cine, y se para, atraviesa la sala porque encima se sientan siempre lejos de los accesos, salidas o pasillos, y sale como si nada hablando bajito, como si "bajito" no jodiera. Jode igual!!!.
¿Qué puede ser tan urgente? ¿Sos médico de guardia acaso? ¿Para qué van al cine si prefieren perderse la película y hablar por celular?. Se hubieran ahorrado el valor de la entrada y mejor aún se hubieran ahorrado romperle las pelotas a todos aquellos que sí vamos al cine a ver películas y a intentar disfrutarlas.

Después también tenemos a los que les gusta estar encimados. Y vas al cine un martes, que no hay nadie, y en la sala hay 6 personas y estos desequilibrados se te sientan al lado tuyo, pegaditos. ¿Por qué? Si hay otras 100 butacas libres, si ya no va a entrar ninguna embarcación de cine-adictos. ¿Qué pasa, tienen miedo a la oscuridad, al viejo de la bolsa, a la soledad... con qué rollo raro cargan que justifique que yo me tenga que sentar tan cerca de un desconocido habiendo lugar?.

Y por último, los fuera de serie: los aparatos que aplauden. ¿A quién carajo aplauden? Diganme por favor.... Perdón, me corrijo, no sólo aplauden. Aplauden y se paran. Aplauden de pie! Idolos!
Nro.1: Los actores no están ahí, es cine, no es teatro.
Nro.2: Estamos en el 2009, y hace ya muuuucho tiempo que no hay ningún señor que esté cuidando ni la película, ni el proyector Super 8. Llegó la tecnología y llegó para quedarse, y no hay nadie ahí atrás zonzitos.... reducción de personal!

ARRASTRADAS vs. SUPERADAS


No sé qué nos hace de una manera u otra, ni quién se encarga de elegir si seremos de las estúpidas románticas o de las cínicas indiferentes, pero lo que sí sabemos es que cada una con lo suyo va por la vida sorteando obstáculos de maneras polarmente diferentes...

Mientras las románticas apelan siempre a lo que sienten, desnudan dilemas y desactivan sus filtros cada vez que están frente a quien quieren o quien les interesa en materia de romance; las cínicas indiferentes son inteligentemente calculadoras, miden cada una de sus palabras y jamás develarían completamente sus sentimientos.

Las primeras son intensas, sentimentales y creen en el amor a pesar de los fracasos, y se la pasan expresando frases que casi siempre les resultan condenatorias.
Y las otras son frías, jamás hacen el ridículo ni pasan vergüenza, y tienen talento natural innato para convertir aquella frase condenatoria en exculpatoria.

Las primeras quieren casarse, las otras quieren estar de novios para siempre.
Unas llaman, a las otras las llaman.
Las primeras reptan, las otras no saben siquiera que clase de animalito es una babosa.

Unas desean hasta que por fin llega. Y están las otras, las tremendas, insistentes de profesión, de toda la vida, que se arrepienten 1000 veces de lo que hacen y sufren, sufren y sufren por amor, siempre!
Algunas veces aprenden, otras no.

A unas no les funciona el alerta contra el ridículo, y las otras descifran a la perfección cada frase recibida, las procesan dentro de sus estructuras psíquicas y decodifican situaciones, entendiendo cuando simplemente no las quieren.http://www.youtube.com/watch?v=HcOl8kyDjvo

miércoles, 23 de septiembre de 2009

VECINOS INVASORES


Odio las frases, pero en este caso necesito citar una que además es malísima... "pueblo chico, infierno grande".

Y digo malísima porque para empezar es una frase mentirosa.

El infierno es GRANDE, se trate de un pueblo chico o se trate de una gran ciudad cosmopólita.

Y lo que hace que el infierno sea grande (que por cierto también es una ventaja porque de esta forma hay lugar para todos) no es la cantidad de gente, sino la calidad de la misma... me refiero ni más ni menos a la gente de mierda, específicamente a los vecinos del orto (que los hay a lo largo y ancho de todas las localidades y no hacen distinción de partido, provincia o país) que no tienen vida propia y gozan con las vidas ajenas. Creo que hasta algunos alcanzan el orgasmo en tal tarea.

Lo que pasa es que volviendo a la parte del "pueblo chico", en agrupaciones menores de gente, todo luce y desluce más.

Tengo una anécdota que describe esto casi a la perfección.
El año que me separé, un día estaba lavando el auto en la puerta de casa, y de repente con paso sigiloso se me acercó una vecina (de mierda, obvio) de la cual apenas yo sabía su nombre de pila, y de la nada me preguntó "¿cómo andás, che?". De arranque el "che" ya estaba de más, pero ella venía con mucho más que esa inofensiva preguntita. Y fue ahí, que dos segundos después me lanzó directamente un "me enteré que te separaste".

En ese instante, puse en pausa mi tarea de enjabonar el auto y di lugar a un breve diálogo:
yo: hola... y cómo es que te enteraste?"
vecina de mierda: no, viste, todo se sabe en un pueblo tan chico como este...
Furiosa porque me saca que la gente sea tan metiche, sin preámbulos le dije ..."me parece que practicás mucho el deporte de mirar de la ventana para afuera... pensaste en hechar un vistazo hacia adentro de vez en cuando?
Y parece que mi preguntita en tono neutro fue como una patada de burro directo a los dientes porque en fracción de segundos, se le transformó la cara y acto seguido empezó a balbucear una seguidilla de frases como: "yo venía a ofrecerte una mano, que cuentes conmigo para lo que necesites, no era para que te pongas así" (y algunas otras que por suerte no retuve).

Pero, como yo seguía inmersa en mi tarea sin mirarla prácticamente, minutos después me vomitó: "Aparte, una noche salí a caminar y escuché que discutían... y por lo que sé además lo hechaste de tu casa. Ojo que te entiendo, eh! (me dijo en forma contenedora)... los hombres son terribles viste?!.

Demasiado para mi gusto! ALTO!
Qué carajo te importa si yo discuto o dejo de discutir? Qué te hace pensar que yo quiero compartir con un desconocido mis opiniones acerca de los hombres o mi vida misma? Por qué querría teniendo amigos y gente que me quiere, compartir mi intimidad con un extraño? Yo vivo a unos cuantos kilómetros del mundo porque me gusta la privacidad, porque no me gusta estar encimados, porque adoro los grandes espacios, porque me gusta disfrutar de mis momentos hermitaños en grandes dimensiones, porque no me interesa saber el nombre de todos...entonces no entiendo por qué la gente se zambulle así de repente en tu vida para sacarte lo que no espontáneamente no dás...

Tema aparte, mi teoría es que esta viejas chotas caminan de noche porque ya no tienen vida sexual, y prefieren salir a dusfrutar gratis de los quilombos de los otros en lugar de hacer un scanneo interno, porque cualquier cosa es más divertida que ocuparse de sus embolantes, ociosas, noveleras, alpedistas, aburridas y asexuadas vidas.

Palabras más palabras menos, la conversación que siempre fue en un tono cínicamente armonioso, concluyó con mis agradecimientos: "Gracias por tu falso interés, pero por ahora mi vida me la reservo para mis íntimos o al menos para los que yo elijo, pero si decido querer publicarla te prometo que me cruzo y te aviso."

Mi vecina obviamente huyó a paso rápido tipo footing, al mejor estilo Tom Hanks en Forest Gump, susurrando y destilando veneno: "Desagradecida... por algo se fue el pobre!" (cuando minutos antes me había tirado la lengua sobre mi ex intentando que yo despotricara contra todo macho vivo, arruinando la especie, como si todos pertenecieran a una misma bolsa de gatos. Ni en pedo ni uno ni lo otro.
Claramente se quedó caliente.

lunes, 14 de septiembre de 2009

PROBADORES



La semana pasada -y sitúense en que estamos en los primeros días de septiembre, en Argentina, en donde todavía hace frío a pesar que hemos tenido algún que otro descolgado día de verano para ojotas y musculosa- cometí el aventurero error de querer comprarme una bikini.
Porque al menos en nuestro país, en pleno enero ya nos están llenando las vidrieras con los sweaters, tapados y botas que se vienen; y después en agosto ya hay quienes venden ropa de verano... cosa de locos dirían las viejas!
El caso es que me encontraba recorriendo todos los rincones de Zara en forma minuciosa y en una de esas encontré un perchero hermosssso lleno de bikinis baratísimas, o no sé si baratísimas pero bikinis que todas sabemos que en verano van a costar 3 veces más por la misma cantidad de centímetros de tela, y fue así como en mi momento económico-visionario de la semana, cacé la bikini y me fui al probador, aún sabiendo que podía NO salir airosa de la situación.

ERROR!!!
No lo hagan! Yo sé lo que les estoy tratando de decir, no vengan con que no fueron advertidas, con que no les avisé, no lloren, no sufran de más, no pierdan tiempo.... les juro que no es momento de bikins todavía. Aprendan del error de otros y ahórrense lágrimas...
Nro.1: Los probadores tienen siempre esa luz blanca de mierda, blanca fría no blanca cálida por si me lee algún empleado de casa de electricidad, que te hace ver todo lo que uno no quiere ver.
Es como mi psicóloga. Ella se encarga de que vos te vayas a tu casa después de cada sesión sabiendo perfectamente la clase de persona que sos, en qué las estás pifendo y cuáles son tus peores miserias... Y esto es lo mismo que pasó acá.
Nro.2: Los probadores son tan chiquitos, que aún a oscuras y quitándole las culpas a la bendita o maldita luz, como estás a 4 milímetros de distancia del espejo no hay forma que no detectes algo. Y tampoco podés retroceder un paso para verte en "un lejos", porque atravesarías la cortina del probador y te encontrarías con varias personas que no conocés y con quienes no tenés ganas de compartir ese momento dificilísimo.
Nro.3: Volviendo al tema de la época del año, y justamente a colación de que no tuvimos todavía varios días de calor seguido, aun portás en el mejor de los casos un tono blanco nieve y en el peor un verde agua, que hace imposible que esa bikini te traslade mentalmente a una playa, a imaginarte como te quedaría en verano toda bronceadita cuando te vayas de vacaciones.... lo más marino que esa bikini de mierda te está haciendo imaginar en este preciso instante es: UN MANATI!!!.
Nro.4: Si vos creías que después de días de galletas de arroz habías bajado de peso (200 gramos), es cuando detectás que en realidad te queda un largo camino por recorrer y que encima tus jeans están estirados, porque es la única forma de que vos hayas podido creer semejante burrada.
Así fue como me hice la boluda, colgué la bikini en la perchita, me puse la remera, el sweater, la bufanda, la campera, los jeans "estirados", las medias, las botas... y salí del probador esbozando un "no me quedó, no es mi estilo" como si la que reacomoda la ropa en Zara necesitara una explicación, y me fui sabiendo que en realidad esa bikini SÍ era mi estilo, ERA la que quería, ERA el color que me gustaba y además para cuando yo esté bronceada y quiera volver a intentarlo, no va haber más bikinis porque se agotaron gracias a la "ganga de primavera" o bien van a costar lo que no valen o no esté dispuesta a pagar.
Estúpidas liquidaciones pre-temporada! Después hablan de los fucking sales del primer mundo...

domingo, 6 de septiembre de 2009

MENSAJES DE TEXTO




Me cruzo a una amiga de auto a auto que hace días no veía, nos saludamos, y al rato me llega un mensaje de texto...


sms ella: Qué hacés Ga!? Todo bien?
sms mío: Si! Qué colgadas, hace mil no nos juntamos. Te llamo, dale?
sms ella: Totalmente. Vos bien?
sms mío: Si!
sms ella: El laburo, los chicos?

ALTO!
¿Cómo hago para responder todo esto por sms? Los sms´s NO están hechos para esto, es para algo rápido, ágil, un ida y vuelta, para decirle algo a alguien que no puede hablar o que no sabés si puede, para una huevada corta..... pero nunca para entablar un diálogo!
No hay forma.
Y menos cuando me viste que iba manejando. De por si tardé horas entre mensaje y mensaje porque respondía en los semáforos, pero igual, una fiaca!!!!!
Un ida y vuelta todo ok. Dos es casi border line. Pero treeeeees.... un zarpe!
Ni en pedo respondo tres mensajes de texto al hilo de una misma persona. O no respondo, o lo más probable llamo al toque porque no da seguir pelotudeando dos horas tecleando como un nerd.

A menos que se trate de una conversación "esemesiana", ya implicitamente acordada porque se trata de una situación que no permite otra cosa...
Caso Norita Dalmazo con su amante mientras este último jugaba al golf con el marido de ella, caso que estés en una reunión que sea 200% un embole y utilizás el sms en reemplazo de un Red Bull o Speed para no torrarte y de paso cagarte de risa con algún otro que veas que está en la misma que vos, caso que con quien quieras comunicarte en ese momento sepas que no puede hablar, caso que estés en una capacitación, seminario o similar, caso que estés jugando al histérico, entre otros ejemplos...

Pero fuera de estos aislados ejemplos, no encuentro explicación a l ida y vuelta de 200 mensajes en forma de bombardeo. Ni siquiera por el lado económico.... porque después de 3 mensajes ya gastaste lo mismo que si hubieras marcado y hablado... o cerca...

Encima yo soy de las que escriben letra a letra, no utilizo ningún tipeador inteligente ni nada que se le parezca, al margen de que mi aparato no cuenta con ellos, asi que me da mucha fiaca estar tipeando algo muy largo.
Y para "pior", casi siempre que escribo por alguna razón algo extenso, no sé como me las ingenio para que me suene el celu en ese preciso instante y al atender en lugar de que se me guarde en borrador lo que estaba tratando de escribir se me esfuma.... creo que me pasa sólo a mi, pero como sea esto no ayuda, no incentiva mi amor por los sms.
Y saben otra? Tengo unas cuántas anécdotas irremontables con metidas de pata vía sms, porque soy de las papa-fritas que cuando escriben mencionando a alguien, después le mandan el mensaje a ese "alguien" y no a quien se lo quería mandar y este "alguien" recibe lo que no tenía que recibir... interesante mecanismo de hacerle saber al famoso "alguien" las mierdas que pensás de él o ella... si habré pasado calor con estas forradas por pendeja!!!

sábado, 22 de agosto de 2009

HOMBRES


No creo en la igualdad de los sexos. Somos diferentes al hombre y por suerte, porque sino sería un embole.

Y tampoco creo en el discurso modernista de la nueva era de que la mujer es superior al hombre... a mi criterio simples frases hechas....
Honestamente, qué haríamos sin ellos, o mejor dicho qué haríamos los unos sin los otros?

Desde lo más básico NO somos iguales. Ellos no se alteran como nosotras. Nosotras gritamos, ellos levantan el tono. Nosotras somos extrovertidas y sacamos todo para afuera, y ellos se tragan los problemas y después tienen gastritis cuando no úlcera.

Nosotras nos enfermamos, nos automedicamos y vamos al laburo. Y ellos con 37.1 de fiebre se quedan en cama, ponen en pausa al mundo, piden delivery de té con limón a la cama y si el cuadro se extiende llaman al abogado para dejar resuelto el tema de los bienes antes de "partir".

Nosotras hablamos, leemos y escuchamos sobre nosotras, y los hombres ni cerca... ellos hablan de laburo, de fútbol, de fútbol de nuevo, de minas y de "antes". ¿Cuándo escucharon que un tipo le pregunte a otro cómo está y que éste se despache a contarle que está triste, deprimido o angustiado? Simplemente no pasa.

Y asimismo los hombres son mucho más básicos y simples, en el mejor sentido de la expresión posible.
Nosotras salimos con alguien que nos gusta y al llegar a casa chequeamos el mail para ver si nos escribió, cuando el tipo todavía no hizo tiempo a llegar siquiera y además no los lee!.
Sépanlo: los hombres abren la cuenta de mails cuando necesitan escribir a alguien o cuando les llegó un mail avisándoles que su casilla está llena y entonces pintan todo, y hacen un genérico DELETE para hacer lugar.

O nos dejan en casa después de salir y por el resto de la semana nuestro celular sufrirá de asfixia porque vivirá ahorcado entre nuestras manos por si él nos llama, por si suena una vez y se pierde la llamada, por si el teléfono se pasa a vibrador y no lo escuchamos, por si nos manda un mensaje urgente. ¿Qué puede ser urgente después de la primer salida?
Y ellos, dejan el celular en el auto, en el baño, en la cama, en lo de los amigos, o sin cargar.
Y además NO tienen nuestro número, porque no lo agendaron bajo nuestro nombre ese día, sino que lo discaron para guardarlo, y varios días después no saben de quién es cada número.

Para ellos cualquier deporte es placer sagrado, para nosotros tortura explícita.

Para nosotras hacer compras es tomarnos el día, para ellos es entrar, salir, me pruebo en casa y en todo caso lo cambio otro día.


Para nosotras arreglarse para salir es tomar el baño por asalto, para ellos es subirse al auto, ponerlo en marcha y preguntar cada metódicos 10 minutos con tono intimidante si ya estamos listas.

domingo, 16 de agosto de 2009

MUJERES



Las mujeres no somos todas iguales, pero SI nos pasan a todas las mismas cosas...



Sufrimos la soledad, tenemos crisis de todo tipo, nos queremos separar mañana, nos volvemos a enamorar pasado, nos angustiamos, tenemos miedo al fracaso y vértigo al éxito...

Y convivimos como todas con temas tan básicos como nuestros padres, nuestros hijos, nuestra guita, nuestro peso, nuestros rollos... temas universales que todo el mundo reconoce, para qué decirlo?
Luchamos en el trabajo, con los hombres, con nuestro cuerpo, con nuestro placard, con nuestras madres, con nuestras amigas, con nuestras suegras (las que las tienen)...

Y nos "deciden" ciclotímicas con total razón porque pasamos de la felicidad a la depresión en un golpe de horno.


Somos así, y aunque todas distintas, nos identificamos entre nosotras, nos reímos, lloramos, tenemos celulítis, hacemos dietas, las deshacemos, tenemos celos, sufrimos por nuestros hombres...

Lo que si es importante remarcar es que nosotras tenemos mucha más autocrítica que los hombres: nos cuesta menos reirnos de nosotras mismas y nos tomamos más a la ligera lo que somos como individuos.

Y sí! Somos muy contradictorias, nadie lo discute. Así como entre amigas nos bancamos y contenemos a muerte cual Red Solidaria, entre no-amigas somos fatales!
Nosotras entramos a una fiesta, hojeamos una revista o llega algún nuevo ejemplar femenino al trabajo, y lo primero que hacemos es mirar lo que lleva puesto.

Queremos ser libres, pero enamorarnos para siempre.
Queremos ser tratadas como iguales, pero que nos abran la puerta.
Queremos que no nos critiquen por como manejamos, pero nos retocamos el maquillaje en los semáforos.

Y además de todo, tenemos esos deslices eventuales, que nos hacen creer que a nosotras nos pasan un montón de cosas y que todas las demás son seres perfectos, felices, que no discuten con sus parejas, que no gritan, que están chochas con sus cuerpos y que encima son multiorgásmicas.

Cuando en realidad, la verdad de la historia es otra y lo sabemos.
Hasta la más perfecta tiene ese raro hábito de ir en grupo al baño, se come las uñas cuando está sacada, se depila, llora, tiene insomnio, usa la pinza de depilar a escondidas, tiene ideas contradictorias sobre la maternidad, se altera, tiene la cartera hecha un caos, no sabe ni va a saber nunca cambiar una rueda, putea cuando le regalan algo para la casa en su cumpleaños y además de todo cada tanto se ve gorda y horrible por más que sea una ex Miss Mundo.

Somos así: una mezcla frenética de un montón de cosas.
A no malinterpretar, no me alisto ni como feminista ni machista (tal vez más machista que feminista en todo caso), simplemente con memoria para recordar que sino fuera por el feminismo hoy yo no estaría escribiendo en este blog porque deberíamos estar todas cocinando y ocupándonos de ser "perfectas amas de casa".

lunes, 10 de agosto de 2009

LA DES-EROTIZACION


Definamos: Es el resultado de algo que está funcionando mal? Un pedido de algo?

Vayamos al ejemplo cotidiano mejor. La deserotización es otra cosa, otras cosas...

Es cuando simplemente ya no tenés ganas de estar con alguien.

Es cuando hacés tiempo hasta cualquier hora con tal de no llegar a la cama y encontrarte con NADIE despierto.

Es cuando así y todo, te ubicás en un vértice de la cama con tal que ese otro no te perciba.

Y cuando así y todo, + todo, + otro todo, el otro -que hasta hoy había tenido un sueño tan pesado que jamás le había permitido escuchar durante la madrugada a tus hijos llorar, ni nunca había detectado una noche tuya de insomnio- justo hoy se despierta y te insinúa una noche de sexo.

Es cuando aquello que antes te enfermaba de lujuria, hoy te da algo parecido al asquito.

Es cuando no podés seguirle el hilo a la conversación del otro porque simplemente te torra.

Es cuando preferís que salga y quedarte sola/o en la casa cuando antes hubieras generado un golpe de estado ante la mínima expresión de deseo.

Es cuando preferís que vengan tus suegros antes que comerte el garrón a solas.

Es cuando te das cuenta que quien elegiste ya no te apasiona y no sabés que hacer con eso.

martes, 4 de agosto de 2009

LAS COSAS QUE NO ME BANCO


-Ir al médico y que te atiendan fuera de hora y que cuando vos llegás tarde pierdas el turno.

-Tener que pasar por la desagradable situación de "tener" que hacer una denuncia en la comisaría y padecer las escenas típicas de todo el plantel policial tomando mate con facturas y rascandose a cuatro manos a cualquier hora del día, mientras las chicas del grupete se pintan las uñas delante de tus narices con el mayor de los descaros, o en la oficinucha de enfrente los de más alto cargo hablan con ese vocabulario de "negativo", "afirmativo" o "natalia-natalia". Paso seguido comerte dos horitas adicionales de tu día falto de actividades para que el oficial a cargo encuentre las teclas de la maquina de escribir y logre escribir un texto medianamente comprensible.

-Que las minas se junten y hablen de sus mucamas, de la nacionalidad de las mismas, de dónde las consiguieron, de cuántas recomendaciones trajeron debajo de sus brazos, de si tienen los papeles y de cuánto les duran (valores estimados porque a estas hijas de puta casualmente nunca les duran).

-A los que manejan ocupando dos carriles como si las líneas punteadas fueran la guía de una pista de scalectric y que les hagas luces, les toques bocina y ellos ni se inmuten.

-Leer los manuales de cualquier cosa. Simplemente no puedo.

-Escuchar a un grupo de divorciadas dándose manija sobre sus ex´s, agravado caso si esto ocurre en un lugar público, en donde ellas hablan siempre fuerte para llamar la atención. No se dan cuenta que esto espanta a cualquier potencial candidato que ande merodeando y aniquila cualquier posibilidad de que alguien vuelva a caer en vuestras garras?

-Que te regalen algo que no se puede cambiar y que te comas el garrón cuando llegás al negocio porque te dicen que eso es de la temporada del ´98 y además era de oferta.


-Que en una fiesta sin DJ todos metan mano y cada 5 minutos cambien la música haciendo vacíos irremontables. Hagan una vaquita pero que el disc-jockey no falte nunca más!

-Hacer trámites en Rentas, Municipalidad, Registro civil, etc. en donde siempre los empleados te hacen saber lo afortunado que sos de que ellos ese día hayan tenido ganas de atenderte.

-Que cuando te quieren vender un auto te aclaren que los kilómetros son reales. Obvio! Sino lo son y los truchaste, no lo vas a admitir, sino para que los tocaste?

-Que mi viejo nos haga posar 100 veces para las fotos en las reuniones familiares.

-Juntar en mi parque los residuos "fecales" de los perros de otros.

-Llamar para hacer un reclamo y te tengan 2 horas pasándote de un lado al otro, y para peor sentir que las "turritas" del call-center se están haciendo una panzada con tu calentura.

-Que mi viejo despotrique contra mi vieja y que mi vieja despotrique contra mi viejo. Ida y vuelta, vuelta e ida, cada vez que los visito.

-Que los perros me rompan la basura y tener que juntar todo ese espectáculo : especialmente saquitos de té destrozados, cáscaras de huevo duro, gel de pañales descartables, restos de la cena del día anterior, etc.

-A las viejas que dicen "mmm....quisito" con el pico fruncido mientras se lastran todo lo que hay a la vista en lugar de decir "exquisito" y esperar a hacer el comentario con la boca vacía.

-A la gente que cuando les preguntás cómo andan, te responden con frases deprimentes y obsoletas como: "Tirando para no aflojar", "Tenés tiempo, querés que te cuente?"... (no, no tengo tiempo, no sé ni para qué te pregunté!).

-Ir al pediatra en invierno y que la sala de espera esté llena de chicos tosiendo y con las velas colgando, lo cual te asegura que si fuiste por un simple certificado o receta, te lleves a toda tu prole también enferma.

-Que hagas un asado y que la gente que fuma te tire las colillas en el parque. ¿Zarpados, quién creen que las junta después? Y si en una de esas se me cruzara no juntarlas, días despues viene mi jardinero -que en realidad es un simple corta-pasto y como tal le encanta pasar por arriba con su nave a todo lo que encuentra en el camino- y me hace un puré de colillas injuntable.

-Que todo el mundo hable de la Gripe A.

martes, 28 de julio de 2009

LO QUE NOS DICEN NUESTRAS AMIGAS...



Lo que nos dicen nuestras amigas, y lo que en realidad sugieren estas palabras de consuelo:



-Es un problema de él, no tuyo, no te hagás cargo... (de qué parte que no me haga cargo?)

-Sabés lo que pasa? que le da miedo una mina como vos (como puede ser sino me vió nunca recién levantada?)

-Lo que pasa acá es que él no sabe lo que quiere, está clarísimo (cómo llegaron a que está clarísimo?)

-Él se la pierde ( y yo también me lo pierdo, o por qué creen que lloro como una imbécil?)

-Ya va a pedirte por favor que vuelvan (que día? a qué hora?)

-Seguro que está con 1000 cosas (no, yo puse en pausa mi vida...)

-Estás segura que tiene tu celular? (watafack?)

-Tal vez no le llegó el mail, o tiene la casilla llena (bullshit1)

-No te habrá llamado a tu casa y justo no estabas? (bullshit2)

-Él te quiere, estoy segura, pero a su manera, de otra forma... (diganme de qué manera si son mis amigas!!!)

-No está preparado para esta relación en este momento (ah!ahora sí que me ayudaron eh!)

-Hacé lo que sientas, llamalo (y así hacés el papel patético, no?)

-Ni se te ocurra llamarlo! (amputenme las manos entonces!)

domingo, 19 de julio de 2009

SOY Y ME HAGO



Pertenezco a una familia disfuncional de esta era, en donde soy la mayor de 3 hermanos (los otros 2 varones)y para más no creo ser la hija que mis viejos hubieran querido que sea.


De chica parece que les di mucho trabajo hasta que fui "grande" y cuando tenía 20 hermosas primaveras, me independicé para darme en adelante mi propio trabajo.

En la primaria era linda, simpática y compradora y hasta buena alumna, pero parece que no era del todo bien aprendida porque me la pasaba en penitencia en el patio del colegio en "shanishidro" muchas tardes a la semana.

Comparada con mis compañeritas de aquella época (que para peor, eran a su vez hijas de amigas de mi mámá), ocupaba el lugar de la peorcita de todas. Y mientras para entonces ellas se destacaban todas en algo (la que no era ayudante en la iglesia, era el mejor promedio, o la más atleta, o la que tocaba la guitarra como los dioses, o la mejor en hockey, o la que tenía a todos atrás al menos), yo me dedicaba a acumular amenazas con ir a un colegio pupilo por como nos peleábamos con mi actual "gran hermano". Y mi vieja que insistía con mandarme a todos lados (colegio bilingüe, guitarra, danza clásica, folclore (si folclore, así como lo leen), francés, inglés, coro, deportes todo el fin de semana, etc.) no sé bien si con el fin de lograr una versión mejorada de mí o bien porque no nos bancaba en casa.

En el secundario fui una especie de larva, flaquísima de las que dan ganas de comprarle un sandwich, que seguía teniendo buenas notas en todas las materias y de los más altos promedios en "amonestaciones", hasta que 2 años después entró mi hermano al mismo colegio y me robó la trabajada posición de ser la peor de la familia. Hasta 3er año tenía el cuerpo insulso y sin forma de alguien de 7mo grado, mientras ya todas mis compañeras lucían sus novedosos corpiños y los varoncetes se dedicaban a tirar de sus breteles elásticos. No había forma que estando en grupo alguien me mirara habiendo tanta mocosa desarrollándose a mi alrededor. Todos gustaban de cualquiera de mis amigas, pero nunca de mí... hasta que me llegó mi ansiado momento y con él el turno de los noviecitos.

Los novios son todo un gran tema en la vida de cualquier exponente del bapuleado género femenino. Como mis viejos eran bastante castradores, casi siempre los mantuve ocultos hasta que eran obvios. De más está decir que nunca ninguno estuvo a la altura de sus expectativas, excepto algún que otro ejemplar... como Julio, un cordobés con doble personalidad, que en mi casa era un señorito francés, estudiante del Liceo Militar, de excelentes promedios, bien parecido, de familia bien y con guita y por supuesto bien educado. Todo bien, el yerno ejemplar, excepto que conmigo era un zángano, que me aburría y que amenazaba con matarse si lo dejaba y por eso demoré en hacerlo. Papafrita!!!

Detrás de él vinieron todos los demás novios que casualmente a mi me divertían proporcionalmente tanto como a mis viejos los alteraba y sacaba de quicio. Yo siempre quise cosas distintas que ellos, y siempre hasta hoy le he dicho NO a las relaciones no-challenge.

Nunca podría ser 100% ama de casa o la señora de. Definitivamente no. Necesito salir, airearme, tener vida propia y sufrir un poco... cuak!

Nos soy familiera. Vivo lejos de todos y me gusta en parte porque tiene que ver con esa necesidad de sentir que no estamos encimados y de sentirme libre.

Paso de la risa al llanto y lloro mucho aunque a algunos esto les de rabia.

Sé de mis virtudes tanto como de mis miserias. Soy proactiva, expeditiva y culo inquieto; y soy tenaz pero tengo miedos.

Soy de las que plantean resistencia y lo dejan saber (lease no puedo disimular mi cara de ojete). Y así como soy intensa, romántica y ciclotímica, también soy ácida e incisiva.

Soy una rea versión pulida. Si bien soy coqueta, no soy de las que les dura todo el día la camisa planchada en el laburo o no se les corre el rimmel en las fiestas. Yo termino hecha un desastre. Soy mal hablada y no sé, ni me gusta cocinar. Y me gusta ser la que hace reir a la gente cuando estoy en grupo.

De grande me hice amiga de las mujeres por elección y aprendí a disfrutarlas, pero sigo siendo un poco varonera. Soy peleadora y mecha corta, pero no me lo banco un rato largo y enseguida necesito demostraciones de afecto.

Me gusta mucho trabajar, lo disfruto, pero mis horas personales están por encima de cualquier trabajo y por eso tengo asumido nunca llegar lejos en relación de dependencia.

Me encantan las fiestas sorpresas y quise tener una, pero ninguno de los que me quiere se dio cuenta todavía y las sigo esperando. Festejar mi cumpleaños me parece lo más y disfruto de cada detalle de organizarlo.

Me rodeo de mucha gente menor que yo porque creo que no permiten que me acartone. Y no puedo vivir sin mis libros del momento, sin mi música o sin mi agenda (obligadamente en papel).

Detesto a quienes se fascinan practicando el ejercicio de espiar por la cerradura de la puerta de los demás.

Odio la coca light, a los vagos, a los que siempre les duele algo y a los que te dicen "negri".

Esta soy yo... Soy, pero también me hago.

viernes, 17 de julio de 2009

¿POR QUÉ EL AMOR SE DILUYE?


¿Será que no tenemos que insistir más con cumplir con determinadas máximas a rajatabla?. ¿Cuándo lo detectamos exactamente?.

Tema difícil porque siempre está en juego el dolor. Pero, lo que más duele es que esto siempre pasa a destiempo. Casi nunca sucede que los dos sienten lo mismo al mismo tiempo, sino que siempre hay uno que se lleva la desagradable sorpresa de que el otro no te quiere más, o no te quiere tanto, o no te quiere ni ver... que es peor.

Evidentemente con quererse a veces no alcanza.
Un ejemplo: La mujer que sin darse cuenta dejó de ser quien era para convertirse en la que él quería que fuera, o en la que ella suponía que él quería que fuera. No hay forma que esto dure. Él se enamoró de vos, vos dejás de serlo e indefectiblemente llega el día en que vos no estás conforme con tu vida o con el lugar que ocupás.

Uno no está en este mundo para llenar las expectativas, ni los vacíos del otro. Está para encontrarse. Pero cuando no te encontrás con el otro, ya no hay nada que hacer. Porque primero no lo encontrás, después no lo soportás y después no hay retorno al no querer continuar.

Y para colmo, en el medio, un día se te metieron los "pingüinos en la cama" y ahí sí te trabaste!.
Entonces te dás cuenta que todo lo que ayer nos enamoró del otro, es lo que hoy nos rompe soberanamente las pelotas...
-El que te encantaba como se expresaba, hoy te parece un denso quema-cerebros
-La que te conquistó porque sabía cocinar, hoy sentís que te quiere engordar como un sapo para que nadie te mire
-El que era prolijo con su aspecto, hoy te resulta un metrosexual
-La que te encantaba como tenía arregladito su depto. de soltera, hoy te parece una obsesiva fuera de serie
-La que te mataba con los tragos que te preparaba cuando llegabas a buscarla, hoy se te cruzó que es una borrachina
-El que te deslumbró por trabajador, hoy te resulta un enfermo-adicto al trabajo
-Y así... el reo que tenía onda hoy es un sucio de mierda, la loca linda de ayer es simplemente una loca, el que tenía mucha personalidad ahora es un ridículo, el fachero se convirtió en un narcisista, y el que te colgaba los cuadros hoy te los revolea por la cabeza...

Propongo: En lugar de seguir jurando mentirosamente "hasta que la muerte nos separe", porque no lo cambiamos por "hasta que la muerte del amor nos separe"???

miércoles, 15 de julio de 2009

STELLA MARIS (a Martín G., muso inspirador)


De movida evitemos las confusiones. Al hablar de Stella Maris no estoy refiriéndome a un ejemplar de ser humano en particular, sino más bien a un representante activo de un grupete de señoritas que transitan por este mundo, como si tal cosa, con la menor responsabilidad jamás vista hacia nuestro sexo.

A las "Stella Maris" ya se les pasó el cuarto de hora, lo que las hace vivir "apuradas" en términos sexuales y no tienen reparo en mostrarse como potenciales desperate-girlfriends.

Un must: Tienen facebook, obvio! De hecho, es casi un invento a su medida podría decirse. Pero lo grave no es esto, sino que las fotos que cuelgan tienen ciertas características que convierten su "espacio" en algo circunstancialmente similar a un almanaque de gomería pedorra. Sus fotos caseras, sacadas habitualmente por otras amigas de la misma secta, son todas imitaciones de poses de modelos, en bikini o con una importante hiper-producción encima con ropa nocturna (nunca un "entrecasa"), y todas las imágenes datan de hace una década atrás (en mi barrio, esto es estafa). Entendemos que quieren hacerse conocer y tener muchos "amigos", pero no es necesario ser tan obvias!!!.

Otras de sus características: están agrupadas a toda boludez que ande circulando por la red y son fans de grupos musicales de los 80´s, la mayoría de las veces de dudosa procedencia. Tienen fotos con con los integrantes de dichos grupos, lo que nos hace preguntar: quién puede estar tan al pedo como para hacer horas de filas en un hotel o estadio y sacarse una foto con alguien que no sabe ni quién sos? Me cuesta entender esta parte por mis características absolutistas, pero entiendan que soy humana y tengo mis dudas existenciales como todos.

Son románticas del sub-grupo "masoquistas intensas", de las que al terminar una relación se autoflagelan con prácticas altamente peligrosas como escuchar cd´s de Arjona con letras en las cuales se ven reflejadas y se sienten identificadas; o se reúnen en grupos con integrantes de la secta que atraviesan por una situación similar y se dan "máquina" ilimitada y "fusilan" verbalmente a todo ser humano del sexo opuesto metiéndolos a todos en una misma bolsa de gatos. Posteriormente, cierran sus contenedores encuentros con frases tales como "son todo iguales!". Chicas, si lo que quieren es auto-flagelarse, por qué no prueban y ejercitan la milenaria práctica de DR que recomienda poner garbanzos en sus zapatos y caminar con una foto de la víctima pegada en la frente, no es más sano que matarse con esa musiqueli?.

Otra: tienen una aparente autoestima en alza, que es lo que explica esa soltura para publicar fotos patéticas. Creen que están buenas y van con la frente alta y las ínfulas de someter al primero que se les presente. DANGER!. Cuidado, tienen su lado oscuro y peligroso. Como seres "maduros" que son tienen el apremio de concretar algunos objetivos corto-plazistas como por ejemplo tener hijos, por qué no una casa y por qué no una vida de ama de casa mantenida que les permita tener mayor cantidad de tiempo libre para hacer reuniones de "Susanitas".

Se enamoran de todos y cualquier bondi las acerca a la parada de la vida denominada "mis objetivos inmediatos". Su abultado historial de fracasos las convierte en reconorosas, sigilosas, felinas, zorras viejas, invasivas y "siembra-objetos"; y son el semillero de una nueva generación de pendeviejas de las que van al super metidas en sus jeans ajustados, tacos altísimos, falsos anteojos Channel con mucho dorado en los laterales (habitualmente calzados como vincha encima de la cabeza), abundante base y rimmel, brushings de peluquería (al menos twice-a-week) y por supuesto dos lindas tetas hechas combinadas con una suculenta dosis de botox labial.

Me pareció ver un lindo gatito!

martes, 14 de julio de 2009

EL INEVITABLE PASO DEL TIEMPO


Hay varios momentos en la vida que nos hacen ver que el tiempo empieza a pasar (o a pasarnos factura, como sea...) y que de ahí en adelante estará en nosotros manejar la velocidad con que esto ocurra y la forma en que nos tomamos el hecho.

Pero el tiempo va a pasar inevitablemente, como que la fuerza de gravedad existe y a eso no hay con qué darle.

La primera vez que tuve un síntoma de esto fue después de parir. Volvés de la clínica donde estuviste 2 o 3 días viviendo en camisón y de donde partiste habitualmente vestida con algún jogging o pantalón cómodo (tal cual lo indicaban las instrucciones que te dieron en el curso pre-parto respecto a la ropa que tenías que llevar en el bolso), y oh sorpresa!... Llegás a tu casa y descubrís que ya nada te entra por más que peses los mismos exactos kilos que antes de haber tenido 1 solo día de embarazo. Y sabés que sos una afortunada porque sos de las pocas que pesan lo mismo que antes, pero aún así tu cuerpo tiene otra forma y además otra consistencia.
Otro gran momento en el que detectas un deterioro adicional al primero, es después de haber finalizado con la controvertida experiencia de amamantar. Aún si antes de parir hubieras estado conforme con tus medidas de fábrica, durante el embarazo pasaste a pensar que tenías la delantera mas sexy del teatro de revistas, para al tiempo pasar a sentirte un muestrario de pasas de uva en extinción.

Cuando yo no había alcanzado mis 25 siquiera, escuchaba hablar a mis amigas más grandes de estos temas, y sonreía como quien ignora lo que le espera... pero todo llega. Y es ahí, justo ahí, cuando llega, que pasa a importarte eso que jamás antes habías advertido: el efecto que provoca la luz de tu baño y como resalta tus "defectitos".

Ya no podes NO ponerte crema al salir del baño porque sino te descamás con un pez, tus rodillas descienden minimamente 5cm de la altura de las piernas donde antes estaban ubicadas, vas al super y priorizás el contorno de ojos a la cena del día, te hacés amiga de la esponja vegetal y de todo producto de belleza que te prometa mentirosamente devolverte tu figura.

Mientras que cuando eras adolescente, para tener la panza chata para ir a la playa, bastaba con no desayunar sólidos ese día, ahora tenés que ayunar como un monje benedictino todo el año, hacer 5000 series de abdominales (series de 10mil!) y fumarte el video de Catherine Fulop y el Ova 3 veces por semana para igualmente NO lograrlo.

Los años pasan, sólo es cuestión de aceptarnos y ser felices con el envase que nos tocó en suerte.

LOS HIJOS



Ser padres es tremendo. Es intenso. Es célebre. Es dificil. Es maravilloso. Es inexplicable.

Los hijos tienen la capacidad ciclotímica de llevarnos de un sentimiento extremo a otro en cuestión de segundos: del amor al odio y de vuelta al amor, de la felicidad a la tristeza, del blanco al negro y del "te adoro" al "te mato"... y todo sin escalas.

¿Quien no les ha gritado alguna vez hasta llorar de vergüenza (¿o a quién no le ha pasado como hijo?), y luego ha tratado de remediarlo durmiendo abrazada a ellos toda la noche en un rincón de la cama?.

¿A quién no le ha pasado de estar mirándolos y sentirse la mamá más orgullosa y acto seguido abrir el cuaderno de comunicados y querer ahorcarlos porque nos enteramos de que tenemos una cita en el cole para renegociar su estadía en el mismo?

¿A quién no se le salió un patito de la fila al escucharlos pelear antes de haberse levantado?

Pero en la vereda de enfrente están todas las satisfacciones que nos dan a diario y es ahi donde justamente nos olvidamos de todo lo anterior y nos convertimos en los seres más ambivalentes.

Ellos tienen capacidades únicas para con los padres.

Los hijos nos hacen crecer como personas, y nos dan incluso ganas de ser mejores personas.

Un hijo nos devuelve una imágen tan fuerte de uno mismo que uno no puede NO verla o ignorarla.

Pasa en las mejores familias... lo sabemos aunque no lo digamos.


LAS COSAS Y SITUACIONES QUE "NO DAN" (para nosotras)


Rápidamente se me vienen una infinidad de cosas molestas. Algunas nos fastidian, otras algo más que eso, con otras hemos aprendido a convivir y con otras despotricaremos de por vida, pero si hay algo en lo que estamos de acuerdo TODAS es que NO DAN! y por ello merecen ser mencionadas con el mínimo fin de sembrar conciencia.

¿De verdad, a quién no le jode una tabla meada por ejempo? Y mucho más aún, cuando te tocó en suerte mojarte la parte de tus piernecitas inmediata a los gluteos al pasar por el baño a ciegas en medio de la noche.... Sencillamente no es justo y punto. Porque una ni siquiera prendió la luz por no despertar a nadie y ese nadie justamente fue el que te dejó la fackintablameada, haciendo que termines depabilándote de la calentura.....

Y como este un millón de otros ejemplos "cotidianos": la jarra de agua/jugo vacía en la heladera, la botella de coca con 2 míseros cm3 sin gas obviamente que no entendemos para que están allí ocupando un lugar en ese artefacto blanco, el tarro de dulce de leche sin contenido, el criadero de cubeteras en el escurridor de platos esperando a que magicamente se llenen y trasladen hasta el freezer por sí solas o con la ayuda de alguna boluda que ande al pedo por la casa, el canuto de carton en el portarollo logicámente sin papel higiénico, o la afamada pileta chorreada de pasta...... patéticos todos.

Pero, si de categorizar se trata, también tenemos las situaciones que NO DAN casi exclusivas del fin de semana, y que a mi entender no tienen quien las desbanque, a saber:
a)tener un individuo in-house que guste de escuchar fútbol en AM,
b)tener un enfermo que se cope y relama viendo TC2000 + el combo de las promotoras con gorritas, falsas rubias de pelo perfectamente planchado y de obligadas calzas blancas que exaltan el "traga-tela".

Cualquiera de las dos me dan náuseas por igual, con lo cual el orden no implica mayores jerarquías en el asunto. NO hagamos diferencias. Seamos honestas, hay algo peor que esto?

Para colmo si te tocó en suerte un "A" de los más graves, posiblemente no haya situación que pueda evitar que se encienda la tele, a la hora del partido, sin importar si es un domingo standard, o si hay cumpleaños, visitas, o lo que fuera. Al "A" grave, le chupa un huevo quien está y el partido se ve o se ve. Amén.